como una cuerda de pita,
un morral casi lleno,
la travesura de un dios
que juega a ser humano
Así eres tú
el páramo que no da lugar
a exquisiteces superfluas
el pan de cada vida,
la palabra que me aleja
de la madre y de todo...
y después la noche
la noche en silencio
el silencio del tiempo
el tiempo justificando pérdidas
en las que te hallo
más cierto que nunca.
Te quiero y basta,
porque eso es lo más y menos importante;
mientras tanto
camino al borde de la certeza por si las dudas...
Duna
2 Dímelo...:
¡Siempre tu amor caminando al borde!
Y siempre me ha gustado tu forma de hacer.
Besos.
André
Por si las dudas
dejo escrito
que en tus poemas
siempre hay versos
que no dejan indiferente
que al leer entran
más profundo,
dejando huella.
Un saludo
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